Cambiar bañera por ducha en Madrid

Básicamente es un sistema para la reparación y recuperación de suelos de madera dañados o desgatados por el paso del tiempo o por el efecto de agentes externos (luz, humedad, golpes…).

El nombre le viene dado porque antiguamente se hacía con cuchillas con las que se iba retirando la capa dañada para su reparación. Actualmente este método prácticamente está en desuso, aunque se sigue utilizando en suelos antiguos de viviendas históricas  con interés de conservación.

A día de hoy, los trabajos de acuchillamiento de parquet se realizan con máquinas destinadas a estos fines (acuchilladoras de parquet). Estas máquinas no utilizan cuchillas, sino lijas que eliminan los barnices y dejan la superficie uniforme. Además, cuentan con sistemas que reducen al mínimo la generación de residuos y polvo, facilitando las tareas previas de limpieza antes de aplicar la imprimación o el barniz.

Aunque hay más tipos, tres son los suelos de parquet más característicos del mercado:

• Parquet de madera maciza: o también llamada tarima maciza, son aquellos suelos fabricados con madera natural de una misma especia y, por lo tanto, compuestos en su totalidad por madera noble. Estos suelos son susceptibles de ser pulidos y barnizados en varias ocasiones (dependiendo del grosor del mismo). Si se cuidan y mantienen correctamente, son superficies que te van a durar toda la vida.
• Tarimas multicapa: se compone de varias capas de madera encoladas. Una de sus principales características es que todas las capas que componen las planchas se fabrican en madera o derivados. Además, la última capa de las tarimas es una chapa de madera exterior, lo que implica que se puede pulir, aunque siempre en menos ocasiones que el parquet de madera maciza por motivos del grosor.
• Chapa de madera: son firmes fabricados enteramente en madera natural, pero en los que su última chapa es mucho más fina que en el caso de la tarima multicapa, por lo que no se pueden acuchillar como en los dos casos anteriores.

No hay una respuesta definitiva a esta pregunta y todo va en función del uso, el desgaste y las condiciones a las que haya estado expuesto el piso aunque, por norma general y a modo de mantenimiento, es conveniente acuchillar el parquet cada 10-15 años.

Si notas que el barniz se ha degradado en ciertas zonas del suelo, tómalo como un síntoma claro de que tu parquet empieza a necesitar un acuchillado. En estos casos, no es conveniente posponerlo mucho porque el suelo puede deteriorarse y sufrir daños mucho más difíciles y costosos de reparar.

Sin entrar en detalles específicos del tipo de barniz, que ya te hemos contado en mayor profundidad anteriormente, los acabados que se pueden aplicar son tres: brillo, satinado y mate.

Elegir el tipo de acabado adecuado según tu gusto, el tipo de madera y las condiciones lumínicas de la habitación es una decisión fundamental, ya que un mismo suelo puede variar considerablemente a nivel visual según sea mate, brillo o satinado.

Actualmente los acabados más demandados para parquets y tarimas en Madrid son los satinados, mates y ultra mates, habiendo caído en desuso el acabado en brillo, siendo la tendencia la búsqueda del aspecto natural con un leve brillo satinado.

No es posible dar una respuesta fija porque lo que se tarda va en función del tamaño de la casa, las distintas áreas que haya que pulir y el estado del suelo aunque, aproximadamente, podemos decir que de dos a cuatro días.

Sin embargo, hay que tener en cuenta que una vez acuchillado y aplicados los barnices, hay que esperar entre dos y cuatro semanas a que este se endurezca y se seque, extremando el cuidado en ciertos aspectos cotidianos, como el uso de tacones, y reforzar las precauciones con los muebles usando protectores.

Sin duda, lo mejor es que las áreas sobre las que se vaya a trabajar estén completamente despejadas, aunque en ocasiones no es posible.

En estos casos, lo que se hace es agrupar los muebles en una parte de la habitación y trabajar sobre la parte despejada para, una vez terminado el acuchillado en la primera área, cambiar los muebles de sitio y terminar el trabajo.